Año 1978

STONES, TAYLOR y Brian

A principios de 1978, después de las vacaciones, los Rolling Stones regresaron a París para terminar "Some Girls" en medio de broncas a menudo amargas. A pesar del ambiente más bien tenso, en marzo de 1978 los Stones tenían grabadas más de cuarenta canciones, suficientes para los tres álbumes siguientes. Mick Jagger ejerció un control casi absoluto sobre el álbum nuevo, pero Keith tuvo la última palabra, regrabando su épica "Before They Make Me Run" con el ingeniero Dave Jordan en el estudio móvil de los Stones. Dieron a la pieza un sentimiento de sonido diferente al resto del álbum, con Keith cantando con un serpentino zumbido nasal que sonaba como un vocalismo árabe de Marte.

Ron Wood conoció en 1977 a una hermosa ex modelo llamada Jo Howard en una fiesta en Kensington, ella odiaba la música rock y pensaba que Woody era un vago exhibicionista. Jo le dijo que trabajaba en los almacenes Woolworth de Oxford Street, así que Ron se plantaba cada día en la entrada de los empleados, hasta que se dio cuenta de que ella le había tomado el pelo. Finalmente la localizó, se la ganó con su sinceridad, galantería y su sonrisa maníaca y su encanto. Y en París la dejó embarazada mientras trabajaba en las canciones de su tercer álbum en solitario, para el cual acababa de firmar con CBS. Cuando se enteró Krissie Wood pidió el divorcio.

En abril de 1978, firmaron su primer gran artista para Rolling Stones Records, un intento de acoplamiento entre los movimientos rock y reggae. Hacía años que Keith y Mick se habían interesado por Peter Tosh. Era el fundador de los Wailers, con Bob Marley, y una figura clave en el mundo del reggae. Más radical que Marley, el alto y feroz Tosh (abreviatura de Winston Hubert MacIntosh, nació el 19 de octubre de 1944) había dejado a los Wailers y había hecho una importante serie de discos que incluían furiosas improvisaciones de reggae.

"Yo no quiero paz (cantaba Tosh). Quiero derechos igualitarios y justicia" era un intransigente revolucionario callejero. También llamó la atención de los Stones el hecho de que Tosh encabezaba uno de los mejores conjuntos del mundo, Word, Sound and Power, cuya sección rítmica (el batería Sly Dunbar y el bajista Robbie Shakespeare) había inventado una forma de reggae más de rock duro llamada rockers, que alimentaba el ritmo fijo del reggae con acentuaciones rápidas y platillos voladores. Al contratar a Peter Tosh, los Stones también consiguieron uno de los más enérgicos baterías de la industria y promocionarían ese nuevo cocaínico estilo.

El 22 de abril de 1978, Mick y Keith volaron a Kingston (la capital de Jamaica) para ver a su nuevo artista actuar en el National Stadium en el legendario One Love Peace Concert, un espectáculo histórico en el que Bob Marley trataba de unir a las dos facciones políticas en la guerra de la isla. Protegidas por tropas armadas, la totalidad de la jerarquía policial jamaicana asistió al concierto. Como preámbulo a su participación, Peter Tosh salió al escenario con un llameante porro de ganja (marihuana) y pronunció un discurso que despotricaba contra el primer ministro, los jueces y los policías, de una manera a ratos obscena y divertidísima. Los acusó de ser unos opresores de Babilonia que reprimían a los hijos de Jah. Luego desde bastidores Keith y Mick vieron la actuación de Tosh y su conjunto, que trastorno al público y que justificó la fe depositada en él. Unas semanas más tarde, en respuesta a su insolencia pública, la policía de Kingston detuvo a Tosh por fumar ganja en el estudio Aquarius en las afueras de Halfway Tree, donde estaba grabando su álbum. Lo llevaron hasta la comisaría y le propinaron una paliza enorme.

En mayo de 1978, los Stones se reunieron en Woodstock, el viejo pueblo bohemio a unos dieciséis kilómetros al norte de Nueva York, para ensayar para la gira veraniega. Mick y Jerry se mudaron a una casa alquilada y se prepararon para ponerse a trabajar en el cercano complejo de Bearsville, propiedad de Albert Grossman, ex mánager de Bob Dylan. Keith llegó a Woodstock con Anita. Estaba tan consumido por la toxicidad de la heroína que tuvieron que llevarlo desde el coche hasta la casa. Con millones de dólares en su cuenta, Keith debía dejar la heroína para que la gira estuviera asegurada. Se mudó a casa de Mick y se auto administró otra cura de caja negra, esta vez con ayuda de marihuana, píldoras y alcohol para paliar el insoportable dolor de los síntomas de abstinencia en vez de hacerlo a rajatabla. Todos los Stones trataron de apoyar a Keith en lo que parecía su momento más espantoso. Cuando los electrodos caían de su cabeza, Jerry Hall (que le caía antipática a Keith) los enchufaba de nuevo. Richards se retorcía en el sofá de la sala de estar en un estado semiinconsciente y se las arreglaba para desengancharse por sí mismo de la heroína. Ahora se había convertido en un mayor alcohólico, pero al menos estaba en aceptables condiciones para ensayar y emprender una lucrativa gira estadounidense.

Esa primavera también se grabó para el primer álbum de Peter Tosh para Rolling Stones Records. Grabado en su mayor parte en los estudios de Kingston con sintetizadores para las líneas melódicas, dos de las piezas de Tosh contaron con partes de guitarra de Keith Richards y Ron Wood. Mick trabajó en el primer sencillo de Tosh, una versión reggae-soul del clásico Motown de Smokey Robinson. Era un intento de rebajar la imagen de severo proscrito de Tosh y sustituirla por otra onda más agradable y bailable. Los Stones estaban absolutamente comprometidos con él, y ese verano les haría de telonero en los estadios estadounidenses. Si algún día hacían una gira por África, le dijo Tosh a Mick, entonces los Stones le harían de teloneros a él.

"Some Girls", fue editado el 9 de junio de 1978 y salvó la carrera de los Rolling Stones. Nervioso, tierno, duro, con un ambiente de asfalto humeante, era un claro reflejo de la complacencia de los Stones por la música de baile, el punk rock y el rock and roll de la new wave. La carpeta troquelada del álbum, un montaje pop de caras famosas en un anuncio de pelucas baratas, tuvo que rehacerse cuando algunas de las celebridades molestas (Lucille Ball y Raquel Welch) solicitaron que se suprimiera su imagen. "Mis You" era la canción estrella del álbum y el primer sencillo, una musiquilla bailable en 4/4 con un estribillo en falsete y la fingida voz macarra de Mick que vende a chicas portorriqueñas. Mel Collins interpretaba el saxo y la armónica de Sugar sonaba como un tren nocturno en el Delta. "Mis You" era el primer sencillo que llegaba al número 1 de Estados Unidos en siete años.

La gira estadounidense de los Stones empezó en Florida en junio de 1978. En Lakeland la primera cita, Keith entre bastidores compró un revolver robado del calibre 38 especial a un agente de seguridad local. Ian McLagan tuvo que aprenderse veinte canciones en un plazo de dos días, porque Ronnie lo había traído en el último momento. Unos días después, Keith convocó a "Mac" a su suite del hotel empapada en reggae, y le enseñó como funcionaba el estilo reggae, con las dos manos saltando por el teclado. McLagan tuvo algunos problemas con los contratos de la gira que la dirección de los Stones le obligó a firmar.

Intentaban trasladar los conciertos de auditorios a estadios de fútbol americano, y tocar en un escenario descubierto rodeado por el logotipo de los enormes labios rojos y la lengua pintada en una lona. Fueron tiempos difíciles para el conjunto, a pesar del resurgimiento creativo y de un álbum de éxito. Mick y Ron se acababan de divorciar. Les Perrin, su agente de prensa de confianza, había fallecido. Amenazados con la cárcel en Canadá, Keith y Anita se separaron. Cuando Anita se fue de Woodstock, Keith se mudó con Ronnie y su nueva novia, Jo Howart, que estaba embarazada.

La gira se dividió en bandos, los animados Mick y Jerry contra el truculento Keith, con Wood en el papel de ligero vínculo. Keith esquivaba a Jerry y no le gustaba que apareciera con los Stones. Emergía de su largo estupor de la droga, e intentaba afirmarse en asuntos de negocios, con el enfado de Mick, que había llevado a los Stones en solitario durante más de una década. Sin la heroína, Keith se comportaba de manera más humana, incluso dejó que una noche Wood trajera a Bill Wyman a la habitación para una sesión con el fin de enterrar el hacha de guerra que permitió a los dos Stones (que nunca se habían llevado bien) hablarse de nuevo. "Woody se empeñó en juntar a las dos partes (declaró Wyman a un periodista). Fue el artífice de que el conjunto estuviera más unido y fuéramos capaces de hablar los unos con los otros, diciéndonos cosas jamás oídas, hizo lo posible para que el conjunto resucitara de nuevo, fue fabuloso".

En esta gira los Stones utilizaban, un avión más pequeño, un Convair 580 turbo propulsado. La gira se trasladó a California, donde Bobby Keys y Nicky Hopkins se añadieron a la parte final de las actuaciones en el enorme Anaheim Stadium. Keith consumía heroína de nuevo y la multitud del público se asfixiaba sobre el polvo rojo de una cancha de béisbol, y todo el mundo decía que las actuaciones eran una porquería.

Las últimas actuaciones fueron en San Francisco. Keith quería aprovechar la energía de la gira, así que los Stones e Ian McLagan se quedaron en Los Ángeles y grabaron algunas pistas en su viejo lugar predilecto, los RCA Studios de Hollywood. Los Stones grabaron unas doce canciones, incluidas las pistas base de "Summer Romance" y "Where the Boys All Go".

El 7 de septiembre de 1978 Keith Moon, el volcánico batería de los Who, murió de una sobredosis de antidepresivos después de desintoxicarse de las drogas y el alcohol. Bill Wyman y Charlie Watts asistieron al funeral en representación de los Stones, que sentían que habían perdido a un amigo.

El 22 de septiembre de 1978 nació en Los Ángeles, Leah, la hija de Ron Wood y Jo Howart.

En octubre de 1978, "Some Girls" había vendido casi cuatro millones de ejemplares. "Respectable" se lanzó como sencillo, seguido rápidamente por "Shattered", para promocionarlos, los Stones accedieron a salir en el mejor programa de la televisión estadounidense, la edición inaugural de la nueva temporada de Saturday Nigth Live, en los estudios de la NBC de Nueva York.

Sería la primera emisión en directo que los Stones hacían en diez años. El conjunto ensayó con el reparto de SNL la primera semana de octubre, alojándose en el Hotel Plaza. Pero la intoxicación del Olimpo saboteó esta reunión de dioses. Los Stones, sobre todo Keith, se mostraron incapaces de decir diálogos de comedia, y las parodias de drogas relativas al conjunto se suprimieron.

En el estudio los Stones tragaron whisky escocés y vodka y esnifaron públicamente rayas de cocaína. El día de la emisión, los Stones se presentaron en la NBC decididamente borrachos. Mick asqueó al país al lamer los labios de Wood cuando ambos estaban cerca del micrófono. La opinión general sobre el programa fue que los Stones lo habían hecho mal. SNL pasó la cinta del ensayo general cuando se reemitió el programa ese mismo año.

Habían pasado dieciocho meses de la redada de Toronto, un periodo de demoras estratégicas y maniobras legales que tuvo su desenlace cuando Keith se presentó ante el tribunal el 23 de octubre de 1978. El interés de la prensa en el caso se había intensificado después de la reciente desintegración de los Sex Pistols, tras el procesamiento del bajista Sid Vicious por asesinar a su novia norteamericana en Nueva York. La tribuna de prensa estaba llena de periodistas ansiosos por certificar también la triste caída en picado de Keith. Pero el inspector que lo había detenido se había matado en un accidente de tráfico ese mismo año, y había rumores sobre que el Gobierno canadiense se sentía en un aprieto por el caso y que Keith podía ser liberado.

Cuando el juicio se puso en marcha, el juez desestimó algunas de las pruebas de la acusación y declaró inaceptable el largo discurso del fiscal sobre Keith. Cuando las acusaciones de tráfico de heroína y posesión de cocaína también se desestimaron, los observadores experimentados tuvieron la impresión de que se produciría un enorme y costoso arreglo.

Después de que Keith hiciera algunas declaraciones de correcto arrepentimiento y se declarara culpable sólo de posesión heroína, se le impuso un año de cárcel y se le concedió la libertad provisional. Otras condiciones impuestas eran un tratamiento antidroga continuado y un concierto benéfico a favor del Instituto Canadiense para Ciegos que celebrar dentro de seis meses. Keith levantó el puño cuando el juez finalizó, inmensamente aliviado por no ir a la cárcel. Puños en alto y felicitaciones en el exterior del tribunal. El acuerdo y los gastos legales le habían costado un importe de tres millones de dólares, pero no le importaba.

La mejor parte es quién le salvó de verdad, si la leyenda es cierta. Según Keith había una muchachita ciega, Rita, que les seguía a todas partes durante la gira de 1975, y Keith había pedido a los pipas que la cuidaran durante aquella gira. Parece ser que esta muchacha conocía o estaba relacionada con el juez que llevaba el caso. Así que sin tener Keith ni el resto del grupo el más mínimo conocimiento, Rita fue a ver al juez a su casa, le contó la historia sencilla de cómo se había preocupado Keith por ella y el resultado fue que el juez ordenó la sentencia más importante para ese delito fuera que los Stones dieran un concierto gratuito para esa escuela de ciegos. El ángel ciego apareció y Keith bendijo el corazón de Rita. Aparecieron rumores sobre la posibilidad de que también tuviera algo que ver con la benévola sentencia, la intervención de Margaret Trudeau.

Se produjo un escándalo en la prensa conservadora canadiense en los ambientes judiciales, y el Gobierno fue obligado a anunciar que presentaría recurso. El asunto se alargó un año más, hasta que desvaneció. Desde entonces no se detuvo más a Keith. Además la sentencia arregló la situación legal de Keith para que pudiera conseguir la carta verde y el visado permanente de entrada para residir en Estados Unidos.

Tras celebrar su trigésimo quinto cumpleaños en Nueva York, Keith cogió el avión con Marlon y Anita para pasar las Navidades en casa. Los fotógrafos del aeropuerto no la reconocieron, hinchada por el alcohol, con el pelo descuidado y huecos en la dentadura, la mujer que antaño había sido la niña bonita de Europa se tambaleaba entre ellos de incógnito.